Música

viernes, 3 de diciembre de 2010

ya vamos por los 15 meses :)



Danito:
Gracias por todo, por ser el mejor y por aguantarme tanto :)
Te amo

domingo, 6 de junio de 2010

9 meses


Ahora, luego de 9 meses me gustan tus ojos porque me veo reflejada en ellos, todos los días a cada segundo. Te Amo

jueves, 3 de junio de 2010

Avanzar



Durante años como estudiantes hemos trabajado en propuestas para el fortalecimiento de la educación pública ejemplo de esto son las largas discusiones que hemos dado por mejorar el acceso, nuevas formas de financiamiento, el rol que tiene el Estado con las universidades de su propiedad y las que no lo son, además de mejorar nuestra participación dentro de nuestra casa de estudios.

Largas luchas que se dieron bajo gobiernos de la Concertación, coalición política que en términos educacionales propendió a la municipalización y subvención de los establecimientos escolares, en el caso universitario se desentendió de las Universidades lo que significó continuar con la política de autofinanciamiento, de este modo las universidades perdieron su rol principal de “docencia, investigación y extensión” para transformarse sin ninguna oportunidad mas que en Universidades cuyo principal rol es el de buscar recursos para financiarse, pues de otro modo están condenadas a desaparecer.

Pero a todo esto se suma una nueva variable: El gobierno de derecha de Sebastián Piñera, ¿qué nos viene?¿hacia dónde avanzar?¿qué proponer?.

El futuro que nos viene como ciudadanos y en particular como estudiantes es un largo camino y muy complicado, el actual gobierno tiene la intención de profundizar las políticas de autofinanciamiento, acabar con las diferencias entre Universidades públicas y privadas (sin si quiera preguntarse cúanto ayuda la Universidad “X” para el desarrollo de nuestro país), transformar las becas en créditos, los créditos solidarios en créditos bancarios; un sinfín de propuestas que tienden a privatizar aún más la educación, profundizando el paradigma instalado en dictadura en el que se propuso que la educación es un “bien personal” y por ende debe ser financiado por quién lo recibirá, pues es una “inversión” con altos réditos.

No olvidando que en estas críticas debemos ser respetuosos, cautos y democráticos, entendiendo que el Gobierno actual fue electo democráticamente por nuestros compatriotas y las políticas propuestas por ellos son sólo eso, propuestas de un gobierno de derecha que responden a una ideología determinada y que puede ser contraargumentadas por nuestras propuestas de educación de calidad pública y democrática.

Debemos avanzar y construir una plataforma que agrupe a los sectores que lucha por una Universidad Pública, cuyo sentido sea el ser un polo de desarrollo para nuestra comunidad en todos sus aspectos, desde las matemáticas a las artes. Mejorar nuestras propuestas históricas: Arancel diferenciado en miras de la gratuidad, Gratuidad, fin a la PSU o en su defecto complementarla con métodos que midan las capacidades de nuestros compañeros, por nombrar algunas de las tantas propuestas que existen.

No caigamos en discursos provocadores de ningún sector, pues los panfletos y consignas son fáciles de hacer y pregonar, pues cuando un debate se gana por lo lindo que se habló o por lo fuerte que se gritó no es construir un movimieno inclusivo. Tampoco lo es trabajar en cuatro paredes, ni insultar a nuestros compañeros solo por tener una idea distinta a la nuestra, debemos discutir con altura de miras, por todo lo anteriormente dicho es trabajo nuestro (de todos) discutir y avanzar por el objetivo común que tenemos: Una educación al acceso de todos y de calidad.

miércoles, 7 de abril de 2010

7 meses :)


Te amo hasta el fin de los días y despúes de eso también

miércoles, 17 de marzo de 2010

Lucas, sus meditaciones ecológicas

En esta época de retorno desmelenado y turístico a la Naturaleza, en que los ciudadanos miran la vida de campo como Rousseau miraba al buen salvaje, me solidarizo mas que nunca con: a) Max Jacob, que en respuesta a una invitación para pasar el fin de semana en el campo, dijo entre estupefacto y aterrado: << ¿El campo, ese lugar donde los pollos se pasean crudos?>>; b) el doctor Jonson, que en mitad de una excursión al parque de Greenwich, expreso enérgicamente su preferencia por Fleet Street; c) Baudelaire, que llevo el amor de lo artificial hasta la noción misma de paraíso.

Un paisaje, un paseo por el bosque, un chapuzón en una cascada, un camino entre las rocas, solo pueden colmarnos estéticamente si tenemos asegurado el retorno a casa o al hotel, la ducha lustral, la cena y el vino, la charla de sobremesa, el libro o los papeles, el erotismo que todo lo resume y lo recomienza. Desconfío de los admiradores de la naturaleza que cada tanto se bajan del auto para contemplar el panorama y dar cinco o seis saltos entre las peñas; en cuanto a los otros, esos boyss-scouts vitalicios que suelen errabundear bajo enormes mochilas y barbas desaforadas, sus reacciones son sobre todo monosilábicas o exclamatorias; todo parece consistir en quedarse una y otra vez como estúpidos delante de una colina o una puesta de sol que son las cosas mas repetidas imaginables.

Los civilizados mienten cuando caen en el deliquio bucólico; si les falta el scotch on the rocks a las siete y media de la tarde, maldecirán el minuto en que abandonaron su casa para venir a padecer tábanos, insolaciones y espinas; en cuanto a los mas próximos a la naturaleza, son tan estúpidos como ella. Un libro, una comedia, una sonata, no necesitan regreso ni ducha; es allí donde nos alcanzamos por todo lo alto, donde somos lo mas que podemos ser. Lo que busca el intelectual o el artista que se refugia en la campaña es tranquilidad, lechuga fresca y aire oxigenado; con la naturaleza rodeándolo por todos lados, él lee o pinta o escribe en la perfecta luz de una habitación bien orientada; si sale de paseo o se asoma a mirar los animales o las nubes, es porque se ha fatigado de su trabajo o de su ocio. No se fíe, che, de la contemplación absorta de un tulipán cuando el contemplador es un intelectual. Lo que hay allí es tulipán + distracción, o tulipán + meditación (casi nunca sobre el tulipán). Nunca encontrará un escenario natural que resista más de cinco minutos a una contemplación ahincada, y en cambio sentirá abolirse el tiempo en la lectura de Teócrito o de Keats, sobre todo, en los pasajes donde aparecen escenarios naturales. Sí, Max Jacob tenía razón: los pollos, cocidos.

Un tal Lucas
Julio Cortázar

domingo, 7 de marzo de 2010

6 Meses




Felicidades mi amor, felices 6 meses.

viernes, 12 de febrero de 2010

Un tal Lucas. Lucas y sus pudores

En los departamentos de ahora ya se sabe, el invitado va al baño y los otros siguen hablando de Biafra y de Michel Foucault, pero hay algo en el aire como si todo el mundo quisiera olvidarse de que tiene oídos y al mismo tiempo las orejas se orientan hacia el lugar sagrado que naturalmente en nuestra sociedad encogida está apenas a tres metro del lugar donde se desarrollan estas conversaciones de alto nivel, y es seguro que a pesar de los esfuerzos que hará el invitado ausente para no manifestar sus actividades, y los de los contertulios para activar el volumen del diálogo, en algún momento reverberará uno de esos sordos ruidos que oir se dejan en las circunstancias menos indicadas, o en el mejor de los casos el rasguido patético de un papel higiénico de calidad ordinaria cuando se arranca una hoja del rollo rosa o verde.
Si el invitado que va al baño es Lucas, su horror sólo puede compararse a la intensidad del cólico que lo ha obligado a encerrarse en el ominoso reducto. En ese horor no hay neurosis ni complejos, sino la certidumbre de un comportamiento intestinal recurrente, es decir que todo empezará lo mas bien, suave silencioso, pero ya al final, guardando la misma relación de la pólvora con los perdigones en un cartucho de caza, una detonación más bein horrenda hará temblar los cepillos de dientes en sus soportes y agitarse la cortina de plástico de la ducha.
Nada puede hacer Lucas para evitarlo; ha probado todos los métodos, tales como inclinarse hasta tocar el suelo con la cabeza, echarse hacia atrás al punto de que los pies rozan la pared de enfrente, ponerse de costado e incluso, recurso supremo, agarrarse las nalgas y separarlas lo más posible para aumentar el diámetro del conducto proceloso. Vana es la multiplicación de silenciadores tales como echarse sobre los muslos todas las toallas al alcance y hasta las salidas de baño de los dueños de casa; prácticamente siempre, al término de lo que hubiera podido ser una agradable transferencia, el pedo final prorrumpe tumultuoso.
Cuando le toca a otro ir al baño, Lucas sufre por él pues está seguro que de un segundo a otro resonará el primer halalí de la ignominia; lo asombra un poco que la gente no parezca preocuparse demasiado por cosas así, aunque es evidente que no están desatentas de lo que ocurre e incluso lo cubren con choques de cucharitas en las tazas y corrimientos de sillones totalmente inmotivados. Cuando no sucede nada, Lucas se siente feliz y pide de inmediato otro coñac, al punto que termina por traicionarse y todo el mundo se da cuenta de que había estado tenso y angustiado mientras la señora de Broggi cumplimentaba sus urgencias. Cuán distinto, piensa Lucas, de la simplicidad de los niños que se acercan a la mejor reunión y anuncian: Mamá, quiero caca. Qué bienaventurado, piensa a continuación Lucas, el poeta anónimo que compuso aquella cuarteta donde se proclama que no hay placer más exquisito / que cagar bien despacito / ni placer más delicado / que despues de haber cagado. Para remontarse a tales alturas ese señor debía estar excento de todo peligro de ventosidad intempestiva o tempestuosa, a menos que el baño de su casa estuviera en el piso de arriba o fuera esa piecita de chapas de zinc separada del rancho por una buena distancia.
Ya instalado en el terreno poético, Lucas se acuerda del verso del Dante en el que los condenados avevan dal cul fatto trombetta, y con esta remisón mental a la más alta cultura se considera un tanto disculpado de meditaciones que poco tienen que ver con lo que está diciendo el docotor Berenstein a propósito de la ley de alquileres.

miércoles, 10 de febrero de 2010

El dieciocho brumario de Luis Bonaparte. Marx

El burgués, y sobre todo el burgués hinchado en estadista, complementa su vileza práctica con su grandilocuencia teórica.

martes, 9 de febrero de 2010

Terrorífico!



O quizás el estudiante de Sociología.

segundo libro.