
¿Qué le parecería si en una votación de senadores hay tres candidatos, el A el B y el C,
supongamos que el A saca un 35%, el candidato B saca un 20 % y el C saca un 23% (los otros votos están repartidos en 4 candidatos más), es decir:
35% Candidato A
20% Candidato B
23% Candidato C
22% Otros 4 Candidatos
¿Quién cree que debería salir. Si solo dos deben ser los electos? ¿Los candidatos A y C? Si eso le parece lo justo, democrático, y lógico a los políticos chilenos no. Políticos que buscan perpetuarse en el poder, mantener dos fuerzas políticas en el Congreso, la Alianza por Chile ( Unión Demócrata Independiente y Renovación Nacional, Derecha) y Concertación (Partido por la Democracia, Partido Socialista, Democracia Cristiana, Partido Radical Social Demócrata. Sector de Centro Izquierda).
No es mi intención transformar mi blog en un blog reaccionario, sin embargo, hace tiempo venía pensando en escribir acerca de la democracia chilena, democracia que está a mi parecer lejana ( muy muy lejana ) de ser representativa, si bien esta democracia tiene distintos tipos de sistemas quisiera enfocarme en el sistema que decide quién integrará el Congreso Nacional: el sistema binominal.
El Sistema Binominal que fue adoptado por Chile en el periodo de la dictadura, es solo uno de los tantos resabios que nos queda de ella, pero sin embargo ha dejado una huella latente y clara de cómo nuestro país ha avanzado en lo que respecta a la dictadura muy poco, o por los menos con una velocidad bastante lenta en lo que respecta a cambios políticos de fondo. El Status Quo que se ha presentado durante años en nuestro país no es representa el sentir de las personas, numerosos debates se han creado y pareciera que cada día más los chilenos están a favor de cambiar un sistema que ha mantenido a estas dos coaliciones con un tipo por nombrarlo de alguna manera “oligopolio político”.
Nombremos un ejemplo concreto y actual de cómo el sistema binominal se burla una vez más de la decisión popular,
Jovino Novoa, VII Circunscripción, 20,74 %.¿Cómo es posible que el segundo cargo más importante a nivel democrático de nuestro país haya obtenido menos del 25% de las votaciones populares? ¿Cómo es posible que un país que se jacta de ser democrático y haber vencido a la dictadura con “el lápiz y papel”, haya olvidado lo importante de la representatividad? Actualmente la clase política dominante ( Concertación y Alianza) no tiene intenciones de cambiarlo claro está, la posibilidad de perpetuarse y mantener el poder durante muchos años más obviamente los llena de tranquilidad y regocijo, es por esto que como ciudadanos CON o SIN derecho a voto debemos llevar este debate a nuestros colegios, liceos, barrios, universidad, trabajo y transformar esta conversación en un tema del día a día, algo cotidiano y de esta manera crear una fuerza que se haga oír, que represente el sentir ciudadano y así no se pase a llevar un vez más al pueblo chileno.